sábado, 8 de marzo de 2008

Iron Maiden y yo (parte 2)


Años mas tarde Maiden ocupo un lugar especial en mi colección el día que a mis manos cayo Somewhere in Time, llegaba en una época cuando saturado de escuchar música de Pantera, Megadeth, Metallica y Sepultura mis oídos encontraron una cadencia y una línea melódica que como un embrujo se metió en mi mente y hasta hoy no sale del sistema.

Con canciones como Wasted Years, Caught Somewhere in time, Alexander the Great, Deja Vu entre otras. Me hicieron ver como en su sencilla complejidad la música de estos británicos era más que unas carátulas de lujo.

Inmediatamente empecé a desempolvar todo lo que tenia y a completar la colección, Piece of Mind adquiría nuevos sentidos y entendimiento, era como si hubiera aprendido a tomar vino, y mi paladar disfrutaba más a cada sorbo. Más o menos este fue el orden en que llegaron los albumnes.

Luego vino Powerslave: Aces High, Powerslave y Rime to the ancient Mariner tomaban lugares de privilegio.

Feark of the Dark, un disco moderno que mostraba un maiden evolucionado, con canciones increíble, Judas Be My Guide, Afraid to shoot Stranger y la legendaria Fear of the Dark lograba adentrarse en mi y empezó a ser el grupo con mayor numero de canciones entre mis favoritas.

Un buen amigo que para mi fortuna me insistía que me faltaba un disco en especial y que para el era el mejor de los albumnes de estudio de Maiden y QUE NO ERA EL SOMEWHERE IN TIME como yo insistía,

Seventh Son of the Seventh Son, el, tomo varias semana en aceptar la invitación, el casette paso unos días en mi cuarto pero cierta vez como era costumbre cada tanto renovaba la música que me acompañaba en el carro, un dia de indesicion lo vi mal parqueado así que decidí incluirlo, Una vez tuve el casette en mi carro, mi vida cambio, entendí que era maiden y cuanto significaba su música, los que me conocen no se sorprenden de verme hablando o cantando solo mientras manejo o mientras veo televisión o en cualquier actividad rutinaria, y con ese disco aquella manía se incremento. Cada vez que sonaba Evil That Men Do el volumen del equipo se ponía a niveles casi insoportables y mi temblorosa y desafinada voz gritaba a pulmon herido, con un ingles cojo, la cruda letra que contrastaba con mi sonrisa de felicidad. No son los músicos mas virtuosos o rápidos y algunas canciones acusan sencillez, pero en su composición son la mejor banda del Metal, los guitarros mostraban líneas fuertes matizadas por armonías especiales, el bajista toca de una forma única, la batería es alegre y profunda y la Voz poderosa como ninguna otra e irrepetible.


En esa época estaba formando un grupo de Heavy Metal y estaba buscando la canción ideal para tomarla como el cover oficial, una canción que dijera mucho de lo que queríamos expresar musicalmente, a la vez fuera lo suficiente buena para que nos aportara como grupo y lo suficientemente sencilla para que nos sonora bien sin caer en el facilismo. Evil that men do, fue la elegida y después de tocarla mil veces (o al menos tratarlo) es desde entonces mi canción favorita del grupo, ese fraseo de guitarra es sublime, su ritmo acelerado pero melódico, su línea vocal agresiva pero armoniosa, ese solo sólido y contundente, la combinación de bajo y guitarras y una batería que parece cargar el mundo, como dije antes Maiden es una sencilla complejidad. Pero escoger una canción de maiden como nuestra favorita es de lejos un crimen, porque cada disco y cada canción es una historia diferente que conceptualiza en diferentes aspectos.

No hay comentarios: